¿Nunca te paso mirarte al espejo y decir: “que mierda es mi vida”? Es horrible, pero te pintás un poco, te arreglás el pelo y s e g u í s . Después, de repente, un día te tropezás y te das cuenta que seguís pensando igual, que no cambió esa i d e a de tirar todo a la m i e r d a. Pero volvés a tomar la decisión de s e g u i r . Un día, cagandote de risa, frenás un poco, parás, bajás de ese estandarte en el que estás parada, y p e n s á s . Pensás mucho. Empezás a fijarte qué está bien, qué está mal. Rescatás lo bueno, lo malo. Tus virtudes y tus miserias. Después de pensar tanto, te das cuenta que todos esos defectos que tenés, te hacen m u j e r , te dan la capacidad de amar. Ahora, sonreís, sos feliz. Ahora, te parás frente a la vida, y te das cuenta que sos de c a r n e y h u e s o .
No hay comentarios:
Publicar un comentario
mensajitos hay